El síndico municipal, Felipe Martínez, volvió a ser centro de críticas tras interrumpir la última sesión de Cabildo con gritos y descalificaciones, en un intento por imponer temas ajenos a la orden del día previamente aprobada.

Testigos calificaron la actuación de Martínez como irresponsable y provocadora, señalando que este tipo de acciones entorpecen el trabajo del cuerpo edilicio y ponen en riesgo el diálogo necesario para tomar decisiones en beneficio de la ciudadanía.
No es la primera vez que el funcionario se ve envuelto en escándalos. De acuerdo con voces locales, su comportamiento prepotente y su insistencia en desacreditar al actual gobierno municipal han debilitado la unidad interna de Morena, afectando el desarrollo político de la demarcación.
En redes sociales, vecinos y usuarios expresaron su rechazo, acusando a Martínez de anteponer intereses personales y de grupo por encima de las necesidades de Nicolás Romero.
